Al respecto del asunto hay mucho que decir, pero tomando en cuenta la petición de una persona a quien respeto, admiro y quiero mucho resumiré "los detalles sobresalientes" y procuraré no "ponerme muy técnico".
Antes de entrar en detalles solo mencionaré que por cierto la propuesta de reforma en materia eléctrica de Peña Nieto es muy similar a la que propuso Vicente Fox en su momento, la cual fue menos agresiva que la propuesta por Zedillo, sin embargo todas en la misma dirección.
Por parte de los hidrocarburos (léase petróleo y gas natural), la cual es la parte más polémica el Presidente dice que con la reforma:
- "Bajarán los precios de gas y fertilizantes"
- "Aumentará la producción petrolera"
- "Aumentará el presupuesto anual del país para invertir en educación, salud y pobreza"
- "Produciremos más hidrocarburos a menor costo"
Todo eso obviamente suena muy bien, pero la realidad es que no hay garantía de tal cosa, es decir, la reforma en la ley no va a decir "se tendrán que bajar los precios de gas y aumentar la producción petrolera". Lo que la propuesta de reforma realmente dice es
"Eliminar la prohibición de que el Estado celebre contratos para la explotación de hidrocarburos".- Significa que el Ejecutivo Federal celebrará contratos con organismos y empresas del Estado y con los sectores social y privado, manteniendo el Estado el dominio sobre los recursos en el subsuelo, sin posibilidad de otorgar derechos a través de concesiones. Evidentemente esto no garantiza que aumente la producción petrolera, simplemente le da la libertad al Poder Ejecutivo (el presidente a través de sus secretarías) de hacer contratos con quien se le hinche para auxiliar y/o realizar todo tipo de trabajos y servicios relacionados con los hidrocarburos.
"Sustraer de las áreas estratégicas del Estado a la petroquímica básica y dar certeza a nivel constitucional para que las actividades de la industria petrolera, tales como el procesamiento de gas natural y la refinación del petróleo, así como el transporte, almacenamiento, distribución y comercialización de dichos productos y sus derivados, puedan ser realizadas tanto por organismos del Estado, como por los sectores social y privado, a través de permisos que otorgue el Ejecutivo Federal." .- Es decir, una vez extraído el petróleo y el gas (los cuales son de la Nación), estos podrán ser transportados, procesados y vendidos en plantas privadas o públicas solo si tienen el permiso del Ejecutivo Federal mediante un contrato, no es una concesión. Esto tampoco significa que será más barato, sino que implica que podría haber un mercado competitivo y por consecuencia podría ser posible que bajen los costos de producción.
Desde un punto de vista técnico, ya sea que lo haga una empresa de estado o privada el proceso industrial es el mismo y no habría razón para que haya diferencias en costos de producción, la realidad es que el hecho de tener una empresa estatal gigante con un sindicato más grande aún resulta en la práctica en una ineficiencia insostenible por varias razones. La "ventaja" de la "competencia" en lo personal lo veo como un "divide y vencerás".
Si nos basamos en las experiencias de otros países es más probable a que las cosas salgan bien que a que salgan mal... sin embargo, la reforma no dejaría de ser una apuesta con todo y los riesgos que esto implica, pero bueno ¿Quién gana más, el que arriesga o el que no se mueve? La cuestión está en arriesgar con inteligencia y eso ya es trabajo de mucha gente.
Ahora veamos qué pasa con la reforma del lado eléctrico. El Presidente grita a los 4 vientos (de televisa) que bajarán los precios de electricidad debido a 2 cosas principalmente:
- Inversión privada en generación.
- Gas natural más barato que sirve para producir la energía.
Realidad: nuevamente en la parte de generación la estrategia es sacar la generación de electricidad como actividad reservada a CFE, se pretende que esto quede a cargo de los privados y de la misma CFE creando así un mercado competitivo de generación, y esto en teoría debería incentivar la eficiencia y reducción de costos lo cual en cierto modo así podría darse pero hasta no hacerlo no sabremos, lo que si es seguro es que siguiendo como estamos no va a mejorar la situación.
Por el asunto del "gas más barato" eso es muy improbable que suceda ya que el mercado de gas mexicano es una "extensión" del mercado de gas del sur de Texas y por ende tenemos los mismos o casi los mismos precios que ahí, y claro la variación es a la par. No importa si el gas se produce acá o en Texas, el precio se determina de acuerdo al valor que tenga en Texas.
En resumen, para mí qué significa la reforma propuesta:
- Mayor competencia en las áreas donde más se agrega valor en las cadenas de la industria energética.
- Mayor control y facultades del Ejecutivo Federal.
- Resultados positivos en el largo plazo una vez que como país aprendamos a manejar los cambios.
En septiembre de este año el Congreso se dará a la tarea de analizar y votar una importante decisión, trabajarán en lo que realmente se les paga y veremos que pasa. De aprobarse pasará poco más de un año para que las leyes secundarias, reglamentos, modelos de contrato y metodologías sean formulados, votados y aprobados... y ahí es donde está lo bueno, en los detalles!!!Por cierto que esta reforma depende del PAN, porque según algunos analistas la alianza en la Cámaras que tiene el PRI no le alcanzan para aprobar la propuesta de reforma, el PRD anda en su rol de "opositor" como era de esperarse (cosa que al PRI no le calienta) y el PAN no dice "ni fu ni fa"... pero sabe que está en la posición de ponerse sus moños.
Esta es mi humilde y positiva opinión de ingeniero energético.
:)
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